¿Cuál de estos 5 tipos de cutis tenés?
Más de una vez nos miramos al espejo y nos gustaría tener una piel tersa, suave y sin manchas. Por eso hoy te dejamos algunos consejos para cada tipo de cutis. Identificá el tuyo y poné en práctica nuestros consejos.
Adquirir la costumbre de cuidarnos la piel es importante no sólo para tener buen cutis el día del casamiento si no también para estar saludables toda la vida. La piel del rostro es sensible, está diariamente en contacto con el smog del ambiente y es por eso que debemos darle un cuidado especial y diario. Quitarnos el maquillaje cada noche antes de dormir y ponernos crema hidratante dos veces al día (por la mañana y por la noche) son dos imprescindibles para tener un buen cutis toda la vida.
A continuación detallaremos los tipos de cutis más comunes, identificate con uno y poné en práctica los consejos que te damos hoy:
- Cutis seco. Es una piel definitivamente poco grasa. Suele ser tirante y reseca con frecuencia. Son más propensos a tener arrugas prematuras. Para cuidarlo y que no se vea seco debes hidratarlo consumiendo más alimentos con alto contenido líquido como las frutas y verduras. Puedes complementar con cremas hidratantes para pieles secas.
- Cutis graso. Estos tipos de pieles se ven brillantes y son grasas al tacto, suelen tener espinillas y se ven los poros abiertos. Necesitan una buena higiene con algún producto purificador de limpieza. En cuanto a la alimentación se recomienda evitar comidas con mucho aceite y frituras.
- Cutis mixto. Es el tipo de piel más común. Con zonas más secas y más grasas, sobre todo en la zona "T" donde se suele acumular más secreción: pera, nariz y frente. Ahí es donde se concentran más puntos negros o suele estar la piel rojiza. Lo ideal es consultar con un dermatólgo.
- Cutis sensible. Este tipo de piel se ve más en las mujeres, ya que por cuestiones hormonales sufren de irritaciones, pizacón, secreción también provocadas por alergias o por el mismo clima. Para su cuidado lo mejor es acudir a un dermatólogo y sobre todo evitar los productos comerciales que pueden generar efectos adversos en la piel.
- Cutis normal. El aspecto es liso y terso, es elástica y está adecuadamente hidratada sin brillo ni aspecto grasoso. No tiene impurezas visibles y sus poros están cerrados. Con una alimentación equilibrada, tratamientos de belleza periódicos y protegiéndola del sol a diario se puede conseguir una piel de este tipo.
