5 consejos para elegir el color del ramo de novia y que vaya a tono con tu look
El ramo de la novia es uno de los distintivos principales de su look. Por tal motivo, el color que llevará es fundamental para complementar de manera correcta todos los elementos que conforman el outfit. Aprende cómo elegirlo.
Por supuesto que el vestido es el protagonista absoluto del bridal look. Pero el resto de los complementos le dan el toque final. Entre ellos, el ramo es el accesorio estrella, por lo que debe ser del color correcto, teniendo en cuenta una serie de factores fundamentales. ¿Cuáles son?
Lo principal: combinar con el color del vestido
Ante todo, y como se trata de un complemento del vestido de novia, el ramo de novia debe respetar y equilibrarse con el color del vestido. En el caso de que tu vestido sea totalmente blanco, es la oportunidad perfecta para que tu ramo sea el toque de color que necesitás. Un ramo total white queda reservado para un look a tono: minimalista y sofisticado.
¡Tampoco olvidarse del tipo de vestido!
También debes tener en cuenta el estilo de tu vestido de novia: si es un estilo vintage o romántico, los colores pasteles en un ramo le quedarán pintados. Si te inclinás por un vestido en colores champagne o nude, ideales para una boda informal, los ramos en colores contrastantes fuertes —como violetas o azules— son la mejor alternativa.
El tipo de boda también influye
Tener una boda campestre al aire libre no será lo mismo, hablando específicamente del ramo, que tener una boda elegante en un salón de lujo. Esto influye también a la hora de evaluar las posibilidades de color que se pueden llevar.
Para bodas rústicas y con una especial inclinación hacia la naturaleza, la combinación perfecta son los ramos de flores silvestres y con mucho color, justamente porque colaboran en seguir el estilo general del casamiento.
Por otro lado, para las bodas de estilo clásico y elegante, las rosas o peonías en blanco, rojo o rosa son la opción más naturalmente combinable. En bodas al aire libre, quedan muy bien las flores al estilo margaritas o claveles, con mucho color y un estilo alegre y desestructurado.
No perder de vista el tipo de ramo
Actualmente, existen diversos tipos de ramos de novia, cada uno con un encanto especial. Si te gustan los ramos estilo cascada, que incluyen generalmente hojas verdes en su interior, es preferible que te inclines por colores blancos, amarillos o pasteles, dado que ya son llamativos por su forma.
Si preferís el clásico bouquet, que combina mejor con vestidos de novia sencillos, podés incorporar flores más sofisticadas e incluir muchos más colores.
Para los ramos elaborados a partir de flores silvestres, que va muy bien con las bodas vintage, las tonalidades de lilas, azules, celestes o tonos cálidos como amarillos o naranjas harán lucir todo el bridal look mucho más. ¡Es cuestión de encontrar el adecuado!
Flores de temporada
Otro factor que no puede ser dejado de lado: comprar flores según la temporada del año. Esto es básico y fundamental, porque puede que te enamores de un tipo de ramo con ciertas flores, pero si están fuera de temporada, te será imposible conseguirlas. En primavera y verano podemos optar por flores como jazmines, lavanda o la caléndula. En invierno, algunas opciones son las magnolias, las anémonas, el girasol o el brezo.
Parecen muchos aspectos a tener en cuenta, pero cuando comenzás a buscar tu ramo de novia, verás que en realidad la elección se va dando de manera bastante intuitiva y natural. Si bien es importante que tengas en cuenta algunas de las recomendaciones que te dimos, el factor más importante es que puedas imprimirle tu personalidad y tus gustos, porque la absoluta protagonista sos vos.