6 motivos para ensayar la ceremonia de casamiento
El ensayo de la ceremonia es como un reconocimiento del terreno. Aprovechen para conocer los pasos de la ceremonia, medir el tiempo de las diferentes tareas y corregir los errores o equívocos. También es un momento para disipar los nervios.
El ensayo de la ceremonia de bodas resuelve muchos interrogantes desde la entrada de la novia hasta la salida del cortejo. Es recomendable conocer todos los pasos y el ritmo al que suceden las diferentes instancias. Los hará sentirse más seguros y confiados en que todo saldrá a pedir de boca y cada involucrado en la ceremonia sabrá cuándo será su intervención y, así, cumplir su papel sin inconvenientes, favoreciendo ese ritmo ideal y armonioso.
1. ¿En qué consiste el ensayo?
Se trata de un repaso de lo que sucederá en la ceremonia religiosa y cuáles serán las tareas del cortejo nupcial. En la ceremonia hay diferentes instancias que requieren de la participación o la circulación de las personas que los van a acompañar, y es recomendable conocer estos movimientos o las ubicaciones a medida que transcurre la boda para evitar las confusiones.
2. ¿Para quiénes es importante?
En general, es para el cortejo, formado por las personas que los van a acompañar durante la ceremonia y tienen algún protagónico. El grupo esencial lo forman los padres, padrino y madrina y los testigos. Sin embargo, también se puede extender con damas de honor, best men o damitas y pajecitos si deciden adoptar estas costumbres. Este acompañamiento anuncia la entrada de la novia y resulta muy emotivo.
3. Calcular los espacios
El ensayo es útil para entender varios pormenores relacionados con el orden del cortejo, las distancias y los espacios dentro del recinto. ¿Cuál es la distribución de los invitados en los primeros asientos?, ¿cuál es la distancia hasta el altar?, ¿cómo se ubicarán todos frente al sacerdote? Con una panorámica del recinto, también pueden evaluar cuál es la mejor ubicación para los invitados mayores y para el fotógrafo. En caso de decorar con flores, pueden charlar sobre esa cuestión.
4. Momentos claves
Además de las ubicaciones frente al altar, existen otras instancias protocolares que sería muy bueno conocer. Algunos momentos claves serían, por ejemplo, cuándo se quita el velo de la novia, cuándo es la liturgia de la palabra, cuándo se pronuncian los votos, cuándo se realiza el intercambio de anillos, cuándo arrodillarse, cómo participarían los novios de la liturgia eucarística en caso de haber misa. Si se postula algún invitado para hacer una lectura, por su protagónico sería aconsejable que participe del ensayo.
5. Estructura de la ceremonia
El ensayo es un reconocimiento del terreno. Las ceremonias tienen sus propias estructuras que conviene conocer. Dentro del ritual romano, los matrimonios pueden celebrarse con misa o, si se cree oportuno, sin misa. Las parejas se preparan en la catequesis previa y habrán charlado con el párroco sobre lo que planean para su casamiento.
6. Ensayar con el sacerdote
Es un tiempo propicio para repasar la estructura del rito religioso. Sería muy afortunado poder ensayar junto con el oficiante de la ceremonia. Tendrían una mirada amplia de cómo será el ritmo de la ceremonia y un tiempo para resolver las últimas dudas que puedan surgir. En algunas ocasiones es el mismo sacerdote quien los convoca a participar del ensayo. En otros casos, ustedes deben solicitar el permiso.
Si cuentan con wedding planner, ella podrá acompañarlos en el ensayo y asesorarlos sobre los puntos claves. Si se preocupan porque todo salga perfecto, entonces no desperdicien la oportunidad de ensayar unos días antes. Si no puede ser en el propio recinto, entonces pueden reunirse en otro sitio.