Ir al contenido principal
Casamiento

20 vestidos de novia que se pueden lucir en cualquier estación del año

Hay vestidos de novia que encajan en bodas de invierno, de verano o estaciones intermedias. Otros diseños son más versátiles para utilizar en cualquier época del año. Conozcamos algunas claves y cómo modificar el vestido si fuera necesario.

¿Aún sin "El" vestido? 👰
Pedí información y precios de vestidos y complementos a empresas cercanas
Pronovias

Cada material produce un efecto distinto, por ello encontramos tejidos de invierno y tejidos de verano. Aunque existe la posibilidad de elegir un diseño de transición, algunas telas son más versátiles para todas las estaciones. Para cambios más rotundos pero sin intervenir el vestido, los accesorios son aliados de las novias. Les presentamos vestidos que se pueden lucir en cualquier época del año y algunas propuestas si necesitan modificar el que ya tienen.

1. Los tejidos más versátiles

El mismo estilo de vestido puede verse diferente según el material usado. Algunas telas marcan la silueta y otras tienen mucho vuelo. Pero sin dudas los tejidos más adaptables para cualquier estación del año son las sedas. Este tejido destila calidad y es muy apreciado en la alta costura. Dentro de las sedas hay muchas variantes, como el mikado de seda o el crepé de seda.

2. Vestidos de transición

Hay modelos que muchas novias eligen como prendas válidas para la ceremonia y luego en la recepción quitan algún elemento desmontable y el vestido se convierte en un segundo diseño. Son vestidos plenos pensados para cualquier estación, por ejemplo con faldas o colas desmontables. Hay faldas que cubren toda la vuelta y otras que muestran el vestido que queda debajo. El añadido de mangas es otra opción de transformación.

3. Sin alterar el look de novia

Si bien algunos cortes de vestidos son sinónimo de ciertas estaciones, como un vestido boho, una prenda soñada para bodas de verano, hoy en día muchas novias ya no tienen en cuenta los parámetros más formales que dicten su estilismo y siguen una idea propia y personal. Todas sueñan con un vestido de novia que las acompañe el día más importante. Por ello, todo lo relacionado con la elección del vestido y el look de novia representa un vínculo especial con el atuendo y todo el proceso.

4. Cambio de planes

En esta etapa en que la pandemia nos expuso ante la propia fragilidad y muchas parejas tuvieron que posponer el casamiento, quizá deban revisar la organización y adaptar el vestido de novia. Algunos factores pueden pesar en las decisiones, el más estresante es el cambio de estación. Sin tener que sustituir un vestido por otro, hay varias opciones para modificar un vestido y adaptarlo a otra temporada del año.

5. Aliados: los accesorios

La propuesta más simple de adaptación son los accesorios, sin tener que intervenir el vestido. Los abrigos, capas y chaquetas de novia son soluciones ideales para pasar de una estación cálida a una fría. Las capuchas de tul con capas largas complementan un vestido de mangas cortas o sin mangas. Las chaquetas cortas son más atemporales. Cuando se trata de modificar un look de invierno, se puede recurrir a los accesorios de color o tocados más veraniegos. Las sandalias de verano también son aliadas para novias de verano, y al revés, zapatos clásicos para el invierno.

6. Adaptar el vestido

Si la boda estaba prevista para primavera y la trasladan al verano, será suficiente con revisar la cantidad de capas de la falda o quitar algún elemento superpuesto, mientras que si la transición es de verano a otoño, habría que revisar la parte superior del vestido y utilizar recursos como las mangas largas o al falso escote. Dependiendo de las regiones, el cambio de verano a invierno es más brusco, por lo cual es la adaptación más difícil de llevar a cabo. En muchos casos, la idea más frecuente es sumar un abrigo o una capa elegante.

7. Asesoramiento y ajustes

En caso de hacer modificaciones, las novias deben pedir asesoramiento a especialistas o expertos en vestidos de novia para buscar las formas de acompañar la transición del atuendo nupcial. Cambiar un escote es uno de los ajustes más relevantes que se puede hacer en un vestido, por tanto la transformación se debe llevar a cabo con sumo cuidado. El largo de la manga también es factible de modificar, o cambiar el tejido cerrado por uno más ligero y transparente.

Lo interesante es que cada novia se sienta reina y se entusiasme realmente con su vestido. Si deben posponer la boda, asegúrense de guardar el vestido de novia y el traje del novio en lugar fresco y seco, hasta que puedan retomar la celebración.

¿Aún sin "El" vestido? 👰
Pedí información y precios de vestidos y complementos a empresas cercanas